Este viernes algunos visitantes del Camping El Sauce advirtieron sobre la presencia de cianobacterias en aguas del río Negro, lo que rápidamente se propagó por las redes sociales generando con ellos múltiples conjeturas sobre el origen de este fenómeno propio de las épocas de calor, tal como lo aclaró el Director de Ambiente del Municipio Paso de los Toros, Richard Da Silva, a quien consultamos acerca del origen del mismo y qué recomendaciones se pueden considerar.
Da Silva señaló que las altas temperaturas de los primeros meses del año, y en especial esta semana que se emitió un aviso de Ola de Calor, es el principal componente para que se produzcan estas afloraciones algales, además que en el caso de las playas de El Sauce, que es una especie de bahía, el agua está más estancada que otras de la costa isabelina.
«Hemos estado monitoreando esta situación y podemos decir que sólo ocurre puntualmente en El Sauce, no así en otras playas como La Picada, La Correntada, Santa Isabel o Centenario, porque están más abiertas al lecho del río y las aguas fluyen más», explicó.
Este viernes se pudo apreciar en horas del mediodía en el camping la coloración verde de la ribera del río, propio de la presencia de cianobacterias, sin embargo, ya a finales de la tarde no se veía presencia de esta alga y los bañistas hicieron uso de los balnearios habilitados sin ningún inconveniente.
«No podemos prohibirle a las personas que se bañen, pero nuestra recomendación es no hacerlo porque puede ser perjudicial para la salud, sobre todo para niños o adultos porque puede producir alergias, afectación de la piel, nariz, boca y los ojos, por tanto lo mejor sería evitar bañarse cuando se presente esta situación y busquemos otras playas», aconsejó Da Silva.
Aclaró además que esta ocurrencia se viene dando en estas fechas en muchas partes del país, como el lago de El Palmar, Rincón del Bonete y hasta en Montevideo, ya que las aguas están con poco movimiento y su temperatura aumenta; aunque agregó que así como aparece la cianobacteria, también en pocas horas puede diluirse si, por ejemplo, llueve, ya que el índice calórico de estos cuerpos de agua disminuye.
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Fotos cortesía de Hugo Acosta
