El consorcio Vía Central, encargado de la construcción de la obra de la vía para el ferrocarril central, presentó este jueves los detalles del trabajo que realizarán en los próximos, que demandarán 2.000 puestos de trabajo y que, según el ministro de Transporte, Víctor Rossi, significará el «futuro» del Uruguay.
La obra se hará durante los próximos 36 meses y tendrá una inversión de 880 millones de dólares, más los 90 millones adicionales de obras viales accesorias.
El consorcio importará 877 kilómetros de riel e instalará, en Flores, una fábrica de durmientes para producir 555.000 unidades. Los trabajos preparativos comenzarán en los próximos días, y cerca del verano se iniciará con los movimientos de suelo y el levantamiento de los rieles.
Según declaraciones a los medios de comunicación realizadas por Alejandro Ruibal, gerente de operaciones de Saccem, y recogidas por Radio Uruguay, en diferentes zonas de Montevideo y Paso de los Toros se colocarán terraplenes para que el tren circule por encima del nivel del suelo.
Entre la capital del país y la ciudad de Progreso habrá una doble vía y se instalarán intercambiadores en varios tramos, además de colocarse «trincheras» para que el ferrocarril circule a nivel subterráneo en varios puntos urbanos, como Capurro, La Piedras, y otros puntos de Montevideo y Durazno.
Ruibal dijo que habrá tres obradores principales, y que el más grande de ellos estará en Florida; los otros dos estarán en Sayago y Durazno, y también habrá una decena de obreros secundarios en diferentes puntos de la obra.
«Esta es una obra extendida. En el pico se va a tener a unas 2.000 personas trabajando en forma directa, y también es una obra que derrama mucho por los servicios», dijo Ruibal, que adelantó que se va a tomar mano de obra local «para todas las tareas que puedan hacer los uruguayos».
Para aquellas tareas especializadas, que «requieren de un expertise particular», se traerán extranjeros, «pero básicamente es una obra que se va a hacer con recursos locales».
Ruibal apuntó que habrá una «importante inversión» en seguridad, y que se colocarán alambrados olímpicos en las zonas urbanas de la vía, barreras «modernas con sonido e iluminación» y más de 200 muros aislantes para proteger a los habitantes de los ruidos del tren.
«Realmente, si alguien va a querer cruzar y escalar un cerco olímpico, pasar por debajo de una barrera a pesar de que hay una luz y un sonido que alertan, esas cosas son culturales, y eso hace a trabajar mucho en la educación. Es lo que tenemos que hacer cuando tenemos un nuevo medio de trasporte, que es eficiente y lo tenemos que apoyar entre todos», señaló.
El ministro de Transporte, Víctor Rossi, dijo en tanto que esta obra «apunta a recuperar la carga que el ferrocarril tuvo en algún momento». «Es el futuro del Uruguay. Estamos convencidos de que el Uruguay necesita incorporar a su futuro el modo ferroviario», comentó.
Fuente: Montevideo Portal.