La Sociedad Uruguay de Medicina Intensiva (SUMI) señala que “todo el personal capacitado para trabajar en la asistencia de los pacientes críticos se está desempeñando en las unidades ya establecidas”.
El Ministerio de Salud Pública (MSP) informó que, en coordinación con el sistema de salud público y privado, asignará 129 camas en los centros de tratamientos intensivos (CTI), 50 camas para rehabilitación de pacientes en recuperación posterior a COVID-19 y 71 unidades destinadas a pacientes con insuficiencia respiratoria aguda.
El objetivo es atender la creciente demanda en terapia intensiva provocada por la evolución de la pandemia.
La cartera explicó que, para lograr la implementación del plan de contingencia, se capacitó a 900 enfermeros y 300 médicos residentes.
Ante estos anuncios, la Sociedad Uruguay de Medicina Intensiva (SUMI) emitió un comunicado el jueves en el que indica que “todo el personal capacitado para trabajar en la asistencia de los pacientes críticos se está desempeñando en las unidades ya establecidas”.
Esto incluye a los médicos intensivistas titulados y a los posgrados en formación.
La nota agrega que el plan de contingencia implementado por el MSP implica una redistribución del personal que está trabajando, “lo que inevitablemente asocia una sobrecarga de trabajo mayor a la ya existente”.
Con respecto a la capacitación planificada por el MSP, los intensivistas señalan que “aún se está desarrollando”.
“Este personal en capacitación, tanto médico como no médico, será convocado en situaciones de extrema necesidad ya que no se considera personal entrenado para la asistencia a pacientes críticos”, afirman.
Por último, SUMI expresa que solicitará a las autoridades de ASSE que informen sobre el proyecto de ampliación de camas, específicamente en lo que respecta a la convocatoria de recursos humanos para asistir a los pacientes críticos.
Según los datos brindados por SUMI ayer, la ocupación total de camas de CTI es de 63,9%.
Fuente: Radio MonteCarlo