A partir de este lunes 1º de abril el Poder Ejecutivo pondrá en vigencia un nuevo régimen de certificaciones para empleados públicos que establece que los trabajadores del Estado solo podrán percibir su sueldo completo durante nueve días hábiles en todo el año si se certifican por enfermedad.
Luego, tendrán derecho al subsidio del Banco de Previsión Social (BPS) que va del 100 al 75% de su remuneración, como sucede con los trabajadores privados.
Sobre esto, existen excepciones como ciertas enfermedades, accidentes laborales, embarazo o tratamientos prolongados.
Actualmente, los funcionarios públicos que se certifican no tienen un límite de días para hacerlo ni se les descuenta nada de su sueldo.
Solo en 2022, los estatales se ausentaron 31 días en promedio, de acuerdo con datos del BPS. Por ese motivo, la Rendición de Cuentas de ese año —publicada en 2023— incluyó por primera vez este nuevo régimen.
En principio, esta disposición se iba a poner en vigor a comienzos de este año. Pero a fines de enero, debido al reclamo sindical, el Ministerio de Trabajo prorrogó por 60 días su aplicación.
A este respecto, la Confederación de Organizaciones de Funcionarios del Estado (COFE) había emitido un comunicado el pasado jueves 21 de marzo en el que volvía a reclamar por la imposición del gobierno del nuevo régimen de descuentos por licencia médica “sin negociación colectiva”.
Según COFE, esto implica un recorte salarial “en forma arbitraria”, que “barre con los derechos de más de 300.000 trabajadores públicos y sus familiares”.
Sin embargo, el ministro de Trabajo y Seguridad Social, Pablo Mieres, respondió que esta vez el cambio sería impostergable.
Fuente: Durazno Hoy