Dicho virus habría causado la muerte de unos mineros hace ya ocho años, según la versión divulgada.
Científicos chinos habrían estado almacenando un virus muy similar al covid-19, y que fue descubierto en 2012 en una mina de cobre abandonada en Tongguan, en la región de Mojiang, en el suroeste de China. El caso y toda la investigación que llevó a su conocimiento aparecieron el domingo en las páginas del periódico británico Sunday Times.
En 2012, el virus fue relacionado con la enfermedad que causó la muerte de seis hombres, quienes presentaron problemas respiratorios similares a los causados ahora por el nuevo coronavirus.
Tres de estos hombres que trabajaban en la mina murieron después de mostrar síntomas como tos, fiebre y neumonía. Cuatro resultaron positivos para coronavirus (familia de virus ya conocida y una de cuyas variantes produjera el conocido brote de SARS en 2002), mientras que los otros dos murieron antes de ser evaluados.
Desde ese episodio, este virus se habría almacenado en el laboratorio de virología en Wuhan, la ciudad china donde comenzó el brote de covid-19 a fines del año pasado.
La crónica publicada por el Sunday Times, que realizó una importante investigación sobre el origen del virus, también afirma haber encontrado evidencia de que China no compartió información sobre esta cepa hermana de covid-19, a pesar de su importancia en la búsqueda del origen de la pandemia.
El reporte indica que fuentes del instituto Wuhan se negaron a explicar por qué aún no habían hablado sobre este virus detectado en 2012, y agrega que los reporteros solo pudieron acceder a esta información gracias a la tesis de un joven médico, cuyo supervisor era un profesor que trabajó en la sala de emergencias del hospital donde fueron atendidos los hombres infectados en la mina.
Esta noticia llega en un momento en que la Organización Mundial de la Salud (OMS) está a punto de ingresar a China para identificar el origen de la pandemia, una investigación que ha sido solicitada por varios países.
Una de las interrogantes que se pretende dilucidar es si el virus podría haber escapado del Instituto de Virología de Wuhan, donde se realizaron experimentos de alto riesgo para aumentar la capacidad de infectar y propagar el nuevo coronavirus, en un intento por comprender los mecanismos que pueden causar una pandemia.
Este proyecto fue ampliamente criticado por países como el Reino Unido y los Estados Unidos, quienes denunciaron el riesgo de que estas pruebas hagan que el virus sea más contagioso y que la seguridad y la transparencia se violaron en un régimen cerrado como el chino.
Según el periódico inglés, en los últimos años, los investigadores del centro han recolectado cientos de muestras de coronavirus en regiones remotas de China, que han utilizado en investigaciones de laboratorio.
China mantuvo el mayor secreto sobre este asunto, incluso exigiendo que todo el trabajo académico y científico se envíe a un comité, que informa directamente al gobierno, para decidir si pueden publicarse.
En su momento, el gobierno chino negó las acusaciones de Donald Trump, presidente de los Estados Unidos, de estar en el origen de la pandemia. Además, castigó a Australia con impuestos sobre sus productos por exigir una investigación transparente sobre lo sucedido, añade el artículo.
Fuente: Montevideo Portal
