En Uruguay la Jura de fidelidad y promesa a la bandera nacional se celebra el día del nacimiento de José Gervasio Artigas, el 19 de junio. En esa jornada los niños de primer año de Primaria y los alumnos de primero de Secundaria y la UTU prometerán y jurarán la bandera, respectivamente.
Pero, ¿te has preguntado alguna vez de dónde surge esta costumbre? De acuerdo con investigaciones del profesor y magíster en Historia Daniel Romeo Torena, este acto ya se realizaba en la Antigua Roma en el siglo IV A.C., pasando luego a la Edad Media, a la Francia de la revolución de 1789, y también a los Estados Unidos de Norteamérica a partir de la revolución de 1776.
En la América Hispana también existen innumerables ejemplos de esta práctica, que se fue profundizando en la medida que se establecieron las nuevas naciones libres e independientes.
En el Río de la Plata, la Revolución de Mayo fue el catalizador para que se integrara a los pobladores el concepto de ciudadanía. En ese marco, destacan las iniciativas de los referentes promotores de las acciones orientadas a lograr la libertad e independencia territoriales.
En la Provincia Oriental, el primer Juramento a la Patria comprobado documentalmente, fue el emitido por las autoridades electas del Primer Gobierno Patrio o Gobierno “Económico-Municipal de la Provincia Oriental”, entre el 5 y el 6 de mayo de 1813, del cual “El Ciudadano José Artigas” fue declarado “Sin Igual Presidente y Gobernador Militar de la Provincia Oriental”.
Posteriormente, Artigas exclamó en 1815 a todos los Cabildos de la Provincia Oriental: “Yo he ordenado a todos los Pueblos Libres de aquella opresión, que se levante una igual [bandera] a la del Cuartel General, blanca en el medio, azul en dos extremos y en medio de éstos listones colorados, signos de la grandeza, de nuestra decisión por la República y de la sangre derramada para sostener nuestra libertad e independencia”.
Esta idea fue también impulsada por sus secretarios más cercanos, Miguel Barreiro y el presbítero José Benito Monterroso, quienes consideraban que no solo había que crear un pabellón del Estado, sino que también era pertinente crear conciencia ciudadana en las escuelas, fomentando el amor a la patria y a sus símbolos.
De este modo, recomendaron a Artigas que se jurara la bandera en la Escuela del “Cuartel General en Purificación”. Ese ejemplo debía repetirse en los Pueblos Libres de la Provincia Oriental, mediante actos organizados por los Cabildos. Y es así como se sigue cumpliendo hasta nuestros días.
¿Juráis honrar vuestra Patria, con la práctica constante de una vida digna, consagrada al ejercicio del bien para vosotros y vuestros semejantes; defender con sacrificio de vuestra vida si fuera preciso, la Constitución y las Leyes de la República, el honor y la integridad de la Nación y sus instituciones democráticas, todo lo cual simboliza esta Bandera?».
¡Sí, juro!
Fuente: ANEP