El arquitecto uruguayo Julio Vilamajó (1894 – 1948), es una figura relevante en la historia de la arquitectura nacional. Egresado en 1915 de la Facultad de Arquitectura de la Universidad de la República, se formó según las pautas clásicas de L’ Ecole de Beuax Arts, en una época de transición hacia la arquitectura moderna. De ahí el carácter ecléctico de varias de sus obras con referencias a la historia dentro de concepciones formales y espaciales novedosas.
En 1920 ganó el concurso de la facultad “Gran Premio de Arquitectura” y accedió a un viaje a Europa (1921-24), que otorgó a su obra influencia hispánica y morisca. Esto se evidencia en los patios con estanques, azulejos, galerías y aleros entejados, usados en las viviendas Pérsico (1926), realizada con G. Pucciarelli y P. Carve; Los Claveles de Felipe Yriart (1927) -con los mismos socios- y Casabó (1925), entre otras.
Preocupado por la demanda de vivienda, diseñó y patentó en 1935 el sistema de prefabricación “Vibro Econo”, con elementos modulados en hormigón armado.
Incursionó en programas de variada complejidad, como los edificios para el Centro de Almaceneros Minoristas (1929); Banco de la República Oriental del Uruguay, Agencia General Flores (1929); Gimnasio Club Atlético Peñarol (1930); Garaje para la Asistencia Pública Nacional (1931); Emilio Fontana (1931); Juncal, con P. Carve (1936); Ventorrillo de la Buena Vista (1946) y Mesón de las Cañas (1947) entre otros.
En su concepción humanista de la arquitectura, otorgó especial valor a los detalles artesanales, incorporando elementos escultóricos y cerámicos, diseñados por Antonio Pena. Su obra se inscribió en las búsquedas de la época y la región, de una arquitectura americanista y apropiada.
Como urbanista, formuló planes y principios teóricos de impronta regionalista, atendiendo al lugar –clima, topografía, vegetación, panoramas- y al uso apropiado de los materiales, técnicas y formas de la tradición. Estas ideas fueron aplicadas en la urbanización de Villa Serrana (1946).
Fue un destacado docente de la Facultad, en Taller de Proyectos de Arquitectura.
Su labor cobró proyección internacional. Con el escultor A. Pena, realizó el Monumento a la Confraternidad Argentino-Uruguaya (1936), en Buenos Aires. La Facultad de Ingeniería (1936-45), proyectada con el Ing. W. Hill, fue pionera en el mundo en usar el hormigón con fines expresivos. Integró el Cuerpo de Proyectistas Asesores para la construcción del edificio de Naciones Unidas en Nueva York (1947).
Texto: Arq. Liliana Carmona, IHA, FADU-UY
Vivienda Augusto Pérsico (1926); Vivienda Casabó (1925); Medalla Central Hidroeléctrica de Rincón del Bonete (1945); Vivienda Yriart (1927)
Garaje Central de Asistencia Pública Nacional (1931); Facultad de Ingeniería (1936-45), Monumento a la Confraternidad Argentino-Uruguaya (1936)
El Arq. Julio Vilamajó participando del equipo internacional de proyecto del edificio de las Naciones Unidas.
En el extremo opuesto, el Arq. Oscar Niemeyer. Foto Frank Scherschel, 1947